Los testigos de esta triste imagen reportaron el hecho a la policía. Además, muchos colgaron y compartieron la fotografía en las redes sociales, en un gesto que trataba de increpar al ser humano de su responsabilidad en estos tristes eventos. Siempre, claro está, hasta el siguiente tuit o post.
En los muros de los perfiles de los habitantes de Devon, muchos eran los comentarios que alertaban de lo impresionante que fue ver un animal de aquel tamaño. Pero también había numerosos que destacaban el peligro creado por los seres humanos que acecha hoy en día los océanos y a los animales que en él viven.
