La Corte Suprema de Estados Unidos dictaminó hoy que el presidente de ese país, Joe Biden, puede culminar con la implementación de “Quédate en México” de la administración de su antecesor, Donald Trump.
Dicho programa fue diseñado para restringir la migración en la frontera que hay entre ambos países.
Luego de un fallo de 5-4, las autoridades judiciales determinaron que la administración de Biden actuó correctamente al tratar de poner fin a la política de Trump.
Fue formalmente conocida como Protocolos de Protección de Migrantes.
La medida establecía que las personas migrantes que solicitaban asilo en la frontera entre México y Estados Unidos, esperaran en territorio nacional.
Ello, mientras se decidían las situaciones.
En su primer día en la Casa Blanca, el actual presidente, Joe Biden, intentó acabar con este programa, pero un tribunal de Texas ordenó reinstaurarlo.
Pero el Gobierno federal recurrió ante el Supremo, que ha fallado a su favor al considerar que la decisión no vulnera la ley.
Fallo a favor de Biden
Un juez obligó a Biden restablecer la política de Trump en diciembre del año pasado.
La situación de hoy ocurrió luego de que los estados de Texas y Missouri, gobernados por republicanos, demandaran el mantenimiento del plan de Trump.
El fallo es una victoria para Biden, que apeló la decisión del tribunal inferior, y su plan para implementar un enfoque más “humano” en la frontera con México.
Los jueces concluyeron que el Tribunal de Apelaciones del 5º Circuito, con sede en Nueva Orleans, se equivocó.
Consideraron que la ley federal de inmigración exigía enviar a los migrantes de vuelta a México si no había espacio suficiente para detenerlos en Estados Unidos.
Los jueces también desestimaron la decisión del 5º Circuito de anular la decisión del gobierno de junio de 2021 de poner fin al programa.
Política adoptada en 2018
El gobierno de Trump adoptó en 2018 la política y dificultó que ciertos migrantes no mexicanos sean liberados en Estados Unidos para esperar los procedimientos.
Incluidos los solicitantes de asilo que temen ser perseguidos en sus países de origen.
Alrededor de 68 mil personas fueron afectadas por la norma desde que entró en vigor en 2019 y hasta que Biden la suspendió.
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